El poder de la radio: "La guerra de los mundos"
- Andrea del Valle
- 24 abr 2020
- 2 Min. de lectura
Los medios de comunicación tradicionales han dado paso a las nuevas tecnologías, a internet y las redes sociales. En la actualidad, estos últimos son los más utilizados, no siendo tan frecuente por las personas mayores, que al haberlos conocido más tarde, tienen más problemas para su uso.
Antes de que todo esto ocurriera, uno de los medios más utilizados era la tradicional radio, junto a la posterior televisión. Fue tal su influencia en la sociedad, que hoy hablaremos de uno de los casos más sonados en este medio, que demuestra el efecto que tenían sus informaciones. Al no haber imágenes, el oyente solo cuenta con el sonido que recibe. Es por esto que es un medio de comunicación muy subjetivo: dependiendo del oyente, la retransmisión puede tener un efecto u otro. Hablamos de “La guerra de los mundos”.
“La guerra de los mundos” no fue otra cosa que un episodio de una serie dramática. Es decir, ni siquiera era real, sino simple ficción. La serie fue dirigida por el actor y futuro director de cine Orson Welles.
A pesar de haber aclarado en dos ocasiones que se trataba de una serie de ficción, la problemática fue que los oyentes que en esos dos momentos no tenían sintonizada la emisora no sabían que lo que escuchaban no se correspondía con la realidad. Fue este hecho clave lo que explica la reacción de la audiencia: pánico en las calles de Nueva York y Nueva Jersey, donde supuestamente se habrían originado los informes de los que hablaba el episodio.
La emisión se hizo en directo el domingo 30 de abril de 1938, a las 9 de la tarde. La población, siguiendo la narrativa de la emisión, pensó que estaban siendo invadidos por alienígenas.
La histeria y la repercusión de la emisión catapultaron la carrera de Orson Welles, aunque estudios posteriores afirman que el efecto fue exagerado. Este estudio proviene de la publicación de la Universidad de Princeton, dirigido por Handley Cantril. Concluye que 1,7 millones de estadounidenses creyeron en el desembarco alienígena y 1,2 millones de personas “se asustaron o fueron perturbados”.
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